lunes, 25 de abril de 2016

Rosina cuelga poemas en la pared



Repárese en que solo he puesto Rosina en el título de esta reseña. La razón es una: ella es una de esas escritoras para las cuales basta y sobra el nombre, a fin de saber que nos referimos no solo a una combatiente de la palabra (poesía, prosa ensayística, artículos de opinión), sino a una decisiva defensora de los derechos humanos y a una sui generis intelectual, creadora, que es imposible de confundir, en medio de esta turbamulta pobladores del cotarro de la literatura y/o afines.